Un logotipo tiene que despertar emociones positivas en su público, hacerles “sentir” y así traspasar barreras y quedarse en su retina, aquí entra en juego el color y la tipografía, nos fijamos mucho en la tipografía ya que es el elemento de nuestro logotipo que nos invitará a leer la marca e indagar en su naming. Por lo tanto, es algo a lo que debemos prestar especial atención y elegir de forma adecuada.